Maldita personalidad la tuya, que sin ser tan perfecta como creía, me tiene obsesionada; maldito tú por no agarrarme del brazo cuando dije aquel fatídico <<Adiós>>, y maldita yo por ser tan estúpida como para no querer olvidarte.
Ahora dime, ¿ves en ella lo que veías en mi?
Sí, por supuesto que lo ves.
Supongo que tú tuviste más fuerza para olvidar porque fuiste el que menos fuerza para querer tuvo.
Es... triste, ¿no crees? El hecho de que no quiera ser feliz con otra persona, que vea a las demás como simples clones llenos de taras, y que para mi sigas siendo el único. Es triste aferrarse a algo que ya no existe.
Aunque quizás nunca existió de verdad, y eso añade más acritud al asunto.
Deséame suerte al menos, la voy a necesitar, aún me queda toda una vida por delante sin ti. Y eso, es peor que cualquier infierno post-mortem. Es un infierno de recuerdos, que poco a poco me quema por dentro, del cual ni tú ni nadie va a ser capaz de salvarme.
Ni siquiera yo misma.
Me recuerda exactamente a mi hace unos meses, sobre todo en eso de "Ahora dime, ¿ves en ella lo que veías en mi? Sí, por supuesto que lo ves. Supongo que tú tuviste más fuerza para olvidar porque fuiste el que menos fuerza para querer tuvo.". Lo di todo en esa relación, y me quedé vacío, no se... me parece que no se esforzó por mi, no tanto como yo por lo menos.
ResponderEliminarHola Heladito, acabo de ver esto ahora JAJAJAJA.
Eliminar